Niños Dios se quedan sin bendecir por la pandemia, tamales a domicilio

– Este día de la Candelaria, las iglesias permanecieron cerradas.

H. Zitácuaro Michoacán, 02 de febrero de 2020.- Por: Guadalupe Solache Rebollo. Ha quedado demostrado que
desde que comenzó la pandemia del Covid-19, todos nos hemos tenido que adaptar a una forma de vivir diferente y
hasta a modificar tradiciones que teníamos muy arraigadas.

Una de estas tradiciones es la del 2 de febrero, Día de la Candelaria; en años pasados esta celebración reunía a
familias completas para degustar los tamales y el atole que son alimentos característicos de esta fecha, también
para ir a misa a bendecir la figura del Niño Dios. Hoy quienes no están trabajando, están en casa, con la
recomendación de no salir si no hay motivo para hacerlo.

Hay que mencionar que desde hace varios años, a nivel local se organiza la Feria del Tamal para reactivar la
economía local y también para motivar la unión familiar, este año dicha actividad fue virtual para este 1 y 2 de febrero
y participaron 20 personas. La lista de los vendedores fue difundida mediante medios de comunicación y redes
sociales. Uno de los requisitos fue vender a domicilio o solo para llevar y extremar las medidas sanitarias.

Aunque las ventas no fueron las mismas de años anteriores, quienes se animaron a vender, recuperaron lo invertido
e incluso se llevaron algo de ingresos, fue el caso de Sara Yandelith González, quien tiene su local sobre la calle
Degollado.

En entrevista expuso que tuvo que extremar la higiene en la preparación y también durante la venta, afortunadamente
sus clientes respondieron bien y los comentarios de quienes este año vendieron tamales fueron similares. Aplaudió la
iniciativa de los organizadores, ya que dio la oportunidad a quienes se dedican a esta actividad a vender para salir
adelante.

Asimismo, debido al aumento de casos positivos de COVID-19, este día las iglesias permanecieron cerradas a fin de
evitar aglomeración de personas, se estuvo bendiciendo a figuras del Niño Dios en días previos a la celebración:
jueves, viernes, sábado y lunes.

Aunque en estos lugares se pegó un anuncio, este cierre tomó por sorpresa a varias personas que acudieron a las
puertas de la iglesia con su Niño Dios en brazos, al encontrar las puertas cerradas tuvieron que volver a casa y
regresar otro día para que les den la bendición como marca la tradición.