Cómo entrenar a un perro adulto recién adoptado

Análisis escrito por Dra. Karen Shaw Becker

29 de Marzo, 2021.-Si hace poco tiempo le diste la bienvenida a un perro adulto, o estás a punto de hacerlo, tu nuevo compañero peludo podría o no estar completamente adiestrado. Dependiendo de su vida anterior, es posible que no haya aprendido a ir al baño, o que solo necesite un repaso ahora que se encuentra en un lugar desconocido con una rutina diaria a la que aún no está acostumbrado.

Pero sin importar los detalles de su vida anterior, ten la seguridad de que tu perro puede aprender a hacer sus necesidades al aire libre siempre que tú te comprometas a ser un padre constante, positivo y paciente.

Por desgracia, un gran porcentaje de perros terminan en refugios de animales debido a problemas de entrenamiento, y casi una cuarta parte de las visitas a veterinarios relacionadas con el comportamiento también involucran problemas de entrenamiento. En mi experiencia, una de las principales razones por las que falla el entrenamiento es porque las personas tienden a ver a sus perros, en especial a los adultos, como humanos de cuatro patas.

Encuentran un accidente en el suelo, no pueden creer lo que ven y reaccionan como si el perro fuera un humano y hubiera dejado un desastre repugnante en el suelo. Pero, esto no es lo recomendable.

Es obvio que los perros no son personas, y es importante tener en cuenta esta distinción en todo momento. También es importante comprender que, si manejas mal los errores de ir al baño en la casa, obtendrás el resultado opuesto al que deseas y empeorará la situación.

La buena noticia es que es posible entrenar con éxito a un perro a cualquier edad. Como mencioné antes, existen tres cosas que te ayudarán con el entrenamiento de tu perro, y no puedo enfatizar suficiente su importancia: consistencia, refuerzo positivo y paciencia.

Las jaulas y el adiestramiento van de la mano

Soy fan del entrenamiento con jaulas y se lo recomiendo a todos los guardianes de perros que conozco, en especial a los que necesitan entrenar a un nuevo amigo peludo. Ya sea que tu compañero canino sea un cachorro o un adulto, proporcionarle su propio espacio acogedor tiene muchas ventajas para ambos. Y una jaula puede ayudar con la capacitación en el hogar, los viajes en automóvil o avión, y las pernoctas con amigos, familiares o en un hotel que admita mascotas.

Muchas personas comparan las jaulas con la cárcel, pero si entiendes un poco la naturaleza de los perros, descubrirás que esto no es verdad. Si tienes dudas, te recomiendo que consultes a alguien que haya entrenado con jaula a su mascota. Lo más probable es que te digan que tu perro busca su jaula para una siesta, dormir o cuando necesita estar solo.

Las hembras salvajes y embarazadas, incluyendo los lobos y los coyotes, buscan entornos parecidos a una madriguera para dar a luz a sus cachorros, y podemos suponer que los primeros recuerdos de muchos cachorros son estar con su madre y sus compañeros de camada en un espacio pequeño y tranquilo. Es por eso que, si le presentas a tu perro una jaula a tu perro de la manera correcta, este puede convertirse en un lugar privado y seguro al que querrá volver una y otra vez por el resto de su vida.

De hecho, si llevas un perro nuevo a tu casa y no tienes una jaula lista para él, es posible que encuentre un lugar propio, debajo de una mesa o silla o incluso detrás del inodoro en el baño que responda a sus necesidades para una «guarida» propia segura y apartada.

4 reglas para un entrenamiento exitoso

1.Si no está adiestrado, nunca lo dejes sin supervición… ni siquiera por un minuto. Es muy importante no darle oportunidades de fallar en el entrenamiento.

2.Alimenta a tu perro en un horario determinado. Bajo ninguna circunstancia recomiendo que tu mascota tenga su tazón lleno de comida todo el tiempo, esta es una mala idea en especial con un perro que no ha sido entrenado. Si lo alimentas con un horario constante de una o dos veces al día, debes saber que después de 30 minutos a una hora tendrás que sacarlo.

Proporcionar alimentos en un horario hace que las pausas para ir al baño sean mucho más predecibles y te permite tener más control sobre la situación. Cuantas más oportunidades le des a tu cachorro para que tenga éxito en hacer sus necesidades afuera, más rápido será entrenado.

3.Premia a tu perro por su buen comportamiento. El entrenamiento exitoso para ir al baño implica recompensar a tu perro de forma constante por realizar comportamientos deseables y elogiarlo de una manera que él comprenda. El tiempo también es muy importante aquí. Cuando usas frases como «Buen chico» y «Buen trabajo», en un tono tranquilo y cariñoso inmediatamente después de que él hace lo que tiene que hacer, refuerzas el comportamiento deseado.

Casi todos los perros hablan el idioma de la comida, por lo que las golosinas también son una buena recompensa durante el proceso de entrenamiento. Cuando tu perro haga sus necesidades en el lugar correcto, felicítalo con palabras y dele un premio dentro de 1 a 3 segundos después del comportamiento.

Recuerda que la consistencia es fundamental. Las recompensas solo son necesarias por un corto tiempo antes de que los perros respondan solo a los elogios. Una vez que esté bien adiestrado, puedes eliminar las golosinas si lo deseas y, en su lugar, ofrecer solo elogios verbales.

4.No castigues a tu perro por sus errores. Sin gritos, sin contacto físico, y nunca frotes su nariz en el accidente. Para muchas personas, esta puede ser la regla más difícil de seguir, pero no puedo enfatizar lo suficiente lo importante que es. Para lograr un entrenamiento exitoso, debes evitar castigar cualquier tipo de error.

Y debes estar preparado, porque van a ocurrir muchos errores. Es importante ajustar tu actitud hacia tu perro cuando se trata de esto. No le des la oportunidad de fallar, pero cuando lo haga, debes saber que tu respuesta prepara el escenario para todo lo que sucede después.

Si respondes de forma negativa, le enseñas a tenerte miedo. Existe una posibilidad de que responda en el futuro yendo a otra habitación fuera de la vista para ir al baño, en lugar de aprender a confiar en ti y decirte cuándo necesita salir.

Tu perro sabrá que estás molesto con él, pero no sabrá por qué. Se sentirá confundido y asustado. Después de todo, eres el centro de su universo, por lo que es muy importante que pueda confiar en ti. Incluso si lo atrapas «en el acto» dentro de casa, no respondas con ira ni con fuerza. Es importante que cada situación relacionada con el entrenamiento sea muy positiva. En resumen, no puedes castigar o asustar a un perro para que se comporte de manera apropiada.

Cómo tener éxito con el entrenamiento de tu perro
Cuando sea el momento de ir al baño, asegúrate de tomar algunas golosinas, ponerle su correa y llevarlo a un lugar específico cada vez. Dale unos 5 minutos para hacer sus necesidades. Por lo general, es tiempo suficiente para que husmee y decida cuál es el lugar correcto.

En las ocasiones en que no vaya, llévalo de vuelta a su jaula y cierra la puerta. Permitir que deambule por tu casa después de no haber hecho del baño la prepara para fracasar. En 10 o 15 minutos, toma las golosinas nuevamente y sácalo. Lo más probable es que no tengas que repetir esto más de una vez antes de que haga sus necesidades, pero prepárate por si acaso sea un par de veces.

Mientras tu perro recibe entrenamiento, no asumas que si no hace sus necesidades cuando lo sacas, no necesita hacer del baño, en especial a primera hora de la mañana. Tu mascota debe estar en su jaula o afuera en su orinal hasta que haga sus necesidades.

Cuando haga lo que tenga que hacer, marca su comportamiento con una señal verbal. Por ejemplo, en el momento en que empiece a orinar, di «ve al baño» en un tono bajo y tranquilizador para marcar el comportamiento que deseas. Creas una relación en su mente con las palabras de «ve al baño» y el acto de hacer sus necesidades. «Ve a defecar» o alguna otra frase corta es una buena señal verbal para defecar.

Tarde o temprano, podrás llevarlo a cualquier lugar que elijas, ya sea en casa o en otro lugar, y darle la señal verbal que elegiste y ¡listo! Dentro de los 3 segundos posteriores a que tu perro termine, debes darle un premio y decirle «buen trabajo». Dale un par de golosinas más y continúa elogiándolo antes de regresar a casa.

No esperes hasta estar de regreso para darle una golosina, ya que le enseñarás a relacionar el regreso con golosinas en lugar de hacer sus necesidades afuera. Por eso que es muy importante llevar las golosinas cuando lo sacas y recompensarlo dentro de los 3 segundos posteriores a que haga el comportamiento deseado.

Un consejo sobre dejar que tu perro se entrene solo

Si tienes un patio cercado, puedes dejar que tu perro salga solo para hacer sus necesidades. Sin embargo, no te recomiendo que hagas esto al principio. Es imposible establecer una señal verbal de «ir al baño» si estás adentro y él afuera. Tampoco puedes darle una recompensa de comida en 3 segundos si estás en diferentes lugares.

Dado que no participas de forma activa en el entrenamiento de tu perro (aparte de abrir la puerta para dejarlo salir), renuncias a la oportunidad de acompañarlo y desarrollar una comunicación bidireccional que les resultará eficaz a ambos cuando estás fuera de casa y que él tiene que hacer sus necesidades cuando lo sacas y en otro lugar que no sea su jardín.

Además, ciertos perros y ciertas razas parecen entender desde una edad muy temprana que deben hacer sus necesidades fuera de casa, y si tienen acceso al patio, aprenderán rápidamente. Otros perros no lo entienden en un principio y necesitan la ayuda de sus humanos para tener éxito.