Rumbo a la revolución 5G
El 5G es la quinta generación de las tecnologías y estándares de comunicación inalámbrica que utilizan los dispositivos móviles para mantenernos informados en casi cualquier sitio. Dicha red conectará de manera instantánea no solo smartphones, sino casas, automóviles, servicios de emergencia, tablets, entre otros objetos, con miras a vivir en ciudades inteligentes.
En México se estima que entre 2022 y 2024 se podrá contar con una red 5G establei, y para lograr esto, la tecnología necesitará viajar en ondas de radio de muy alta frecuencia a velocidades elevadas por una banda ancha. Sin embargo, no podrán pasar a través de paredes, ventanas o tejados, y se volverán considerablemente débiles en distancias largasii, esto implicará que las compañías inalámbricas requieran instalar estaciones base con unidades de antenas activas (AAU).
Esta nueva generación de banda ancha alcanzará conexiones con tiempos de respuesta imperceptibles para el usuario y hará realidad que cualquier objeto pueda conectarse a una red móvil.
Gracias a los materiales empleados en las antenas inalámbricas –que son transparentes a las frecuencias de radio– la información podrá viajar con una rapidez inimaginable, mejorando por mucho, la experiencia y la calidad de los servicios a nivel mundial y local. Desde tener 100 veces más dispositivos conectados en la red, hasta permitir movilidad autónoma con velocidades de 500 km/hiii.
Al respecto, Iván Escalante, responsable de la Unidad de Negocios Policarbonatos (PCS) en Covestro México, explicó: “nos encontramos desarrollando materiales innovadores y sostenibles, convenientes con las infraestructuras inteligentes que incluyen tecnologías de sensores y un entorno de comunicación digital. Aunado a ello, participamos en estudios de transmisión de datos de radiofrecuencias, soluciones de gestión térmica, integración electrónica y materias primas recicladas basadas en la familia del policarbonato”.
El policarbonato es un termo plástico que posee propiedades que resultan atractivas para diferentes industrias, ya que es muy resistente a los impactos, al calor y tiene transparencia óptica, por lo que es apto para una amplia gama de opciones, diferenciándose de otros materiales, como el metal o el vidrio.
Dicho material ha demostrado su eficacia en una amplia gama de aplicaciones eléctricas y electrónicas, y gracias a su alto desempeño también es utilizado para la tecnología 5G, ya que los policarbonatos son mecánicamente robustos, ligeros, transparentes a las frecuencias de radio, adecuados para moldeo por inyección y cuentan con libertad para el diseño.
“En esta ocasión, el policarbonato de Covestro se encuentra en la cubierta exterior de una antena para ampliar su alcance, ya que fue creada para adaptarse a entornos específicos dependiendo del ambiente, o en caso de que tenga que estar expuesta u oculta en un dispositivo. Así, cumplimos con los requisitos técnicos que ayudan a construir ciudades inteligentes”, explicó Escalante.
En dicho contexto, la innovación 5G, con sus altas tasas de transferencia, tendrá un impacto significativo en el diseño de teléfonos inteligentes. Las antenas para esta tecnología requerirán más espacio, por lo que las soluciones metálicas utilizadas hasta la fecha para la parte posterior de los dispositivos serán reemplazadas en el futuro por cerámica, vidrio o plástico.
El objetivo detrás de tal desarrollo es conectar personas, autos, edificios y redes de energía y, sobre todo, navegar por Internet a una velocidad inimaginable y superior a la actual, todo ello, mientras el mayor número de aparatos se conectan al mismo tiempo, sin afectar la inmediatez a la que viaja la información.