PARA ÉSTE AÑO
PARA ÉSTE AÑO
Arena suelta
Por Tayde González Arias
Las prácticas, como los rituales de año nuevo son diversos, retomar lo que no se cumplió de un año viejo al otro o nuevo es algo que muchos también hacemos, pero tener metas a cumplir objetivos a lograr sin duda, la mayoría lo expresamos, lo escribimos o tenemos en mente, ante ello claro nos debe quedar que más que deseos o aspiraciones, nada será posible, ni en menos o mayor realidad que todo aquello en lo que pongamos nuestro empeño, dedicación y trabajo.
Porque nada se logra sin disciplina, como tampoco se alcanza un peldaño sin ir paso a paso sobre la escalera del esfuerzo.
es mi deseo que primero que nada tengamos salud, para poder salir al trabajo generar recursos y cubrir nuestras necesidades. Que el amor no falte, porque eso evitará caer en depresión o soledades que lleven a la depresión. Me permito compartir el siguiente poema del Poeta, dramaturgo y escritor romántico francés: Víctor Hugo, quien es
considerado como uno de los escritores más importantes en su lengua. Fue también un incansable activista en lucha social, denunciando hasta el fin de su vida la segregación social;
Te deseo primero que ames,
y que amando, también seas amado.
Y que, de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que si es,
sepas ser sin desesperar.
Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar.
Y porque la vida es así,
te deseo también que tengas enemigos.
Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,
para que, algunas veces, te cuestiones
tus propias certezas. Y que entre ellos,
haya por lo menos uno que sea justo,
para que no te sientas demasiado seguro.
Te deseo además que seas útil,
más no insustituible.
Y que en los momentos malos,
cuando no quede más nada,
esa utilidad sea suficiente
para mantenerte en pie.
Igualmente, te deseo que seas tolerante,
no con los que se equivocan poco,
porque eso es fácil, sino con los que
se equivocan mucho e irremediablemente
y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
sirvas de ejemplo a otros.
Te deseo que siendo joven
no madures demasiado de prisa,
y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
y que siendo viejo no te dediques al desespero.
Porque cada edad tiene su placer y su dolor
y es necesario dejar
que fluyan entre nosotros.
Te deseo de paso que seas triste.
No todo el año sino apenas un día.
Pero que en ese día descubras
que la risa diaria es buena,
que la risa habitual es sosa y
la risa constante es malsana.
Te deseo que descubras,
con urgencia máxima,
por encima y a pesar de todo,
que existen, y que te rodean,
seres oprimidos,
tratados con injusticia y personas infelices.
Te deseo que acaricies un perro
alimentes a un pájaro
y oigas a un jilguero erguir triunfante su canto matinal,
porque de esa manera,
sentirás bien por nada.
Deseo también que plantes una semilla,
por más minúscula que sea,
y la acompañes en su crecimiento,
para que descubras de cuántas vidas
está hecho un árbol.
Te deseo además, que tengas dinero,
porque es necesario ser práctico,
y que por lo menos una vez por año
pongas algo de ese dinero frente a ti y digas
«Esto es mío»
sólo para que quede claro
quien es el dueño de quien.
Te deseo también
que ninguno de tus afectos muera,
pero que si muere alguno,
puedas llorar sin lamentarte y sufrir
sin sentirte culpable
Te deseo por fin que
siendo hombre, tengas una buena mujer
y que siendo mujer, tengas un buen hombre,
mañana y al día siguiente,
y que cuando estén exhaustos y sonrientes,
hablen sobre amor para recomenzar.
Si todas estas cosas llegan a pasar
no tengo más nada que desearte.
Una vez que nuestro poeta toca todos los puntos necesarios para alcanzar la buena vida, habrá que seguir sus ideales, y agregar los nuestros de tal manera que no sólo sea un buen 2024, sino que cada día encontremos el entusiasmo ardiente para ser mejores hijos, padres, hermanos, ciudadanos del mundo.