La alimentación de los mexicanos esta en riesgo
Ciudad de México; 24 de septiembre de 2019
· El ejercicio del presupuesto federal para el agro en 2020, presenta una reducción cercana a 20 mil millones de pesos
· Para pequeños y medianos productores de leche, este anuncio “cayó como patada en el estómago”
· México ha aportado al mundo 200 productos alimenticios, y ayudó, en tiempos recientes, a evitar hambruna en Asia
La reducción en 20 mil millones de pesos al Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2020 en el agro, cayó como “patada en el estómago” para millones de mexicanos, ya de por sí subalimentados en el 50 por ciento dados los niveles de pobreza, con el agravante de que los pequeños productores de leche del país, “los costos de producción continuarán por arriba del precio al que les compra el gobierno”.
El dirigente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, Álvaro González Muñoz, lamentó “la insensibilidad del gobierno federal y de los legisladores, por la baja asignación de recursos fiscales para el campo en general y, de manera particular, para el sector ganadero especializado en producción de leche y sus derivados”.
Consideró como inexplicable que, en la distribución de recursos para el sector primario, “el gobierno dé preferencia a la construcción de aeropuertos y de infraestructura petrolera, en lugar de apoyar a los pequeños y medianos productores de alimentos, donde está el mayor potencial de aumentar los índices de productividad”.
Consideró que prácticamente todos los mexicanos estamos de acuerdo en que los alimentos están por encima de otros intereses económicos. “Lo importante es que tengamos el estómago lleno y que nuestros hijos aprovechen oportunidades de estudio y desarrollo físico y mental para enfrentar la vida en los tiempos por venir. Sentimos que estos principios, no sean compartidos por el actual gobierno”, dijo.
“Necesitamos que en México se repita una segunda ‘Revolución Verde’, y que se ubique entre las naciones más productivas, como lo ha demostrado en el pasado, con la aportación al mundo de más de 200 productos originarios que ahora son la base de la alimentación del universo, como es el caso del maíz, de hortalizas y productos industriales del sector, como cacao.”
Siguió diciendo que “en tiempos recientes, para nadie es un secreto que el señor Borlaug, que fue director del Centro Internacional del Maíz y el Trigo (CIMMYT), llevó semillas mexicanas de trigo que fueron la base para evitar la hambruna en países como la India, Bangladesh, Paquistán y Turquía”, entre otras naciones asiáticas.
“Ahora ya no –como dice el Presidente López Obrador— “los recursos fiscales son para fortalecer la economía de Petróleos Mexicanos, la infraestructura aeroportuaria y el Tren Maya”.
Siguiendo con el tema de la industria lechera, afirmó que las grandes empresas productoras de leche y sus derivados –“que no pasan de diez, cuando los pequeños y medianos productores somos 150 mil”—han acaparado tradicionalmente los recursos gubernamentales, y los cupos de importación de leche en polvo”, ahora declaran que se necesitan más recursos para mantener los niveles de producción del referido alimento y sus derivados.
Las grandes industrias, tanto nacionales como extranjeras, “están muy alarmadas por la reducción de los recursos fiscales. Estaban acostumbradas a ser beneficiarias de importaciones de leche adulterada y, por supuesto, si se trata de leche en polvo, pues es de segunda o tercera calidad, pues nos llega descremada y sin los ingredientes naturales que tiene la leche nacional.
Por otra parte, es público y notorio que, del extranjero, nos llega todo tipo de leche, que es adulterada. Un ejemplo lo tenemos en las “fórmulas lácteas”, a las que les han agregado vitaminas, minerales y proteínas. “Eso, aquí y en China, es adulteración”.
Sin embargo, se comercializa, a través de las tiendas de autoservicio, como leche y en ocasiones al precio de la leche.