Juguetes tradicionales de madera resisten avance de la tecnología, su venta a la baja

– “Aún hay personas que gustan de comprar estos productos y recordar la infancia que vivieron”: comerciante.

Zitácuaro Michoacán, 03 de enero de 2018.- Por: Guadalupe Solache Rebollo. Con el avance de la tecnología, las autopistas, motos y carros eléctricos o mecánicos, juegos de destreza, armables, montables, muñecas, videojuegos, consolas de videojuegos y aparatos electrónicos como celulares y computadoras se han vuelto lo más cotizado en los niños actualmente. Esto significa que los juguetes de madera han sido reemplazados.

“No niego que los juguetes tradicionales o artesanales están quedando en el olvido, esos juguetes que uno salía a presumir con los vecinos elaborados con madera como los carritos, mesitas, juegos de cubos, baleros, tambores, yoyos y otros más; ya no se venden igual”, dijo en entrevista el Señor Miguel Ángel, comerciante de la Feria del Juguete que se desarrolla en el Jardín Constitución.

En este sentido, precisó que aunque ya no se compra igual, aún hay personas que gustan de adquirir uno, y así recordar las buenas experiencias y buenos recuerdos de la infancia: buscan que sus hijos o nietos vivan algo similar al regalarles un buen juguete de madera.

La compra de los juguetes artesanales, dijo, no es exclusivo de las personas de escasos recursos, es muy variable la gente que todavía se interesa en adquirirlos.

Asimismo, explicó que los nuevos juguetes cada vez son más atractivos y requieren de un menor esfuerzo de los niños, es decir, cada vez son más fáciles de utilizar, sin representar un desafío para los menores, como podría serlo insertar el balero o hacer algún truco con el trompo.

Por ello aseveró que los papás deben tomar en cuenta que los juguetes de plástico se descomponen más rápido, si se les cae una pieza difícilmente se pueden reparar, en cambio los artesanales duran más y se pueden arreglar además ayudan a desarrollar mucho las habilidades mentales y sobre todo fomentar la creatividad en los niños.

“No los elaboramos nosotros, los traemos de sitios como Quiroga, Pátzcuaro y otros lugares de Michoacán en donde se producen de forma cien por ciento artesanal, por el alza a su materia prima si nos ha generado un costo extra, pero tratamos de mantener el precio para que la tradición siga”, recalcó Miguel Ángel.

«La venta ya no es como antes, pues la tecnología y los juguetes electrónicos ha desplazado la venta de los trompos, aviones de madera, tablitas mágicas, pero son juguetes que nuestros abuelos disfrutaron y pienso seguir ofreciéndolos para preservar esa tradición», subrayó Miguel Ángel, quien convocó a los Reyes Magos a no dejar en el olvido este tipo de regalos para el 6 de enero.