Continúan hundiéndose tumbas en el panteón municipal, suman 15
H. Zitácuaro Michoacán, 03 de octubre de 2017.-Por: Guadalupe Solache Rebollo.- A causa de la temporada de lluvias y del pasado sismo que se registró, en el panteón municipal se siguen hundiendo tumbas, actualmente hay en esta situación alrededor de 15, afirmó el administrador, J. Refugio Garnica Castillo.
“Cada caso lo hemos ido atendiendo en conjunto con los propietarios de los espacios, pues no queremos que nos genere un accidente de alguna persona que venga al panteón, como ocurrió el año pasado”, dijo.
En este sentido, precisó que no hay motivos para que los ciudadanos se quejen, pues hay contacto permanente con ellos para mantener en buen estado las tumbas y que el panteón municipal tenga una buena imagen. Al inicio de la presente administración se recibían de 30 a 40 quejas diarias, hoy no hay ninguna, esto se debe al trabajo constante que se realiza.
“Todo el equipo de limpia del panteón monitoreamos la situación que tiene cada tumba, en cuanto detectamos si hay algún daño se procede de inmediato según corresponda la situación, así nos ha resultado bien y por eso este lugar tiene una imagen impecable para los visitantes”, recalcó Garnica Castillo.
El administrador del panteón municipal, señaló que los propietarios de los espacios deben hacer conciencia de no abandonarlos y estar al pendiente, ya que si hay algún hundimiento se corre el riesgo de que haya accidentes, en años pasados ya han ocurrido.
Insistió en que cuando son tumbas con lápidas se le comunica el daño al propietario del espacio para que éste determine la forma en que se debe proceder; lo arregla por sí mismo o con apoyo del personal del lugar se repara el daño, en cualquier caso se hace mediante un trabajo coordinado, pero jamás se ha desatendido el problema.
Expresó que “aquellas que constan de un montículo de tierra nosotros mismos y todo el personal arreglamos el daño, únicamente rellenamos de tierra donde hace falta y lo acomodamos, para el caso de las que tienen un cerco y lápidas no podemos intervenir porque se le puede romper alguna pieza y resultaría molesto para los propietarios”, explicó.
Añadió que un hundimiento ocurre cuando son tumbas muy viejas y durante las lluvias principalmente los ataúdes que son de madera se deshacen y es entonces que se tienen los movimientos de tierra; una segunda razón es cuando se trata de tumbas recientes que en el momento del entierro no se pudo acomodar bien la tierra, entonces ahora con la gran cantidad de agua es que se compacta y se requiere de más tierra para rellenar el hueco.