MICRONUTRIENTES
MICRONUTRIENTES
ARENA SUELTA
POR TAYDE GONZÁLEZ ARIAS
Las prácticas y hábitos alimentarios forman una parte importante de la cultura de los pueblos. Además, las funciones sociales y de la identificación cultural que esta práctica cumple, transmite conocimientos y experiencias similares que permiten a las poblaciones adaptarse a las condiciones ecológicas de su región.
La historia de las relaciones entre los pueblos se ha distinguido por un extraordinario intercambio de alimentos
Las comidas generan cálidas sensaciones de tradición familiar. Numerosas costumbres nacionales y regionales se basan en la comida, que siempre ha sido una forma de atención, de agasajo y de hospitalidad.
En pocas palabras la comida significa toda una escala de valores para todos los seres humanos hasta llegar a convertirse en un arma política ya que, en algunos lugares del mundo, la palabra comida, equivale a la diferencia entre la vida y la muerte. Hay tan
poca comida que la muerte es una realidad.
Pero en este mundo de contrastes, aparecen en el otro extremo de la escala, las personas que consumen tantos alimentos que amenazan sus vidas con la obesidad.
En los últimos años los rápidos cambios sociales y económicos están ejerciendo una fuerte influencia en las costumbres alimentarias
Entre los principales factores que están modificando estas prácticas se encuentra la disponibilidad, debido a que existen sistemas de transporte y conservación es posible consumir una variedad de alimentos, incluyendo productos foráneos no conocidos. La disponibilidad de un gran número de alimentos procesados que no siempre son ventajosos desde el punto de vista económico y de salud por el gran número de productos químicos que contienen.
El desarrollo de los medios de comunicación y su uso para propaganda de alimentos, que pueden confundir o desorientar a los consumidores. Nuevas estructuras sociales con menor influencia de la familia y la tradición. Cambio en prácticas de comportamiento incluyendo las de alimentación. Cambios en la forma de vida con tendencias al sedentarismo. Estas influencias sociales, económicas y culturales han logrado en los países industrializados eliminar problemas nutricionales, pero han aparecido otros no menos graves como la obesidad, la diabetes, arterioesclerosis, hipertensión y ciertas formas de cáncer.
Para comprende el asunto de lo relevante de la alimentación es necesario tener claros conceptos básicos de la nutrición, por ejemplo, los macronutrientes que son aquellas sustancias químicas orgánicas que proporcionan energía al organismo para un buen funcionamiento, y otros elementos necesarios para reparar y construir estructuras orgánicas, para promover el crecimiento y para regular procesos metabólicos. Este grupo está constituido por proteínas, grasas, hidratos de carbono.
Los micronutrientes son elementos esenciales que los seres vivos, incluido el ser humano, requieren en pequeñas cantidades a lo largo de la vida para realizar una serie de funciones metabólicas y fisiológicas, para así mantener la salud. Para la nutrición humana y animal, se consideran como micronutrientes a las vitaminas y minerales, se llaman así porque se requieren diariamente en pequeñas cantidades.
Para la nutrición humana, los requerimientos diarios de micronutrientes son en cantidades generalmente menores a 100 miligramos, mientras que los macronutrientes se requieren en gramos.
Por otro lado, la fibra, es la parte de los alimentos de origen vegetal que no es digerida ni absorbida en el intestino delgado, llegando al colon donde es sustrato para la microflora fermentativa. Está constituida por todos los compuestos resistentes a la digestión enzimática. Tales como polisacáridos no amiláceos, lignina, almidón y proteínas resistentes algunos compuestos fenólicos.
Fisiológicamente la fibra dietética promueve efectos beneficiosos como el efecto laxante y/o la disminución de los niveles de colesterol y de glucosa en sangre, se encuentra únicamente en los alimentos de origen vegetal y en ningún caso en los de origen animal, La fibra soluble atrae el agua y se convierte en gel durante la digestión.
Esto lentifica el proceso digestivo. Este tipo de fibra se encuentra en el salvado de avena, la cebada, las nueces, las semillas, los fríjoles, las lentejas, las arvejas (chícharos) y algunas frutas y verduras. Algunos tipos de fibra soluble pueden ayudar a disminuir el riesgo de cardiopatía. La fibra insoluble se encuentra en alimentos como el salvado de trigo, las verduras y los granos integrales. Este tipo de fibra les aporta volumen a las heces y parece ayudar a que los alimentos pasen más rápidamente a través del estómago y los intestinos.
Sin embargo, hay que tener en claro que ningún alimento individual cumple todos los requerimientos y funciones que el organismo necesita. Por esto, para una alimentación adecuada es necesario consumir alimentos de todos los grupos que han sido clasificados de acuerdo con los nutrientes y las funciones que desempeñan en el organismo.
