Indignación en Ziráhuato: Familia entierra cadáver equivocado
– Todo se debió al error de la fiscalía de Tijuana
H. Zitácuaro Michoacán, 30 de marzo de 2020.-. El pueblo de Ziráhuato de los Bernal se encuentra indignado, ya que por un error de la Fiscalía de Tijuana, una familia de la comunidad enterró en el panteón de este lugar el cuerpo de quién pensaban que era el un familiar fallecido allá.
Javier Quiroz González nació en la tenencia de Ziráhuato de los Bernal, perteneciente al municipio de Zitácuaro, a la edad de 15 años emigró a la ciudad de Tijuana, Baja California, donde desarrolló su vida, hasta el pasado 7 de diciembre en que un paro cardíaco acabó con su existencia cuando tenía 47 años de edad, ahí y luego de una serie de errores por parte del personal de la Fiscalía General del Estado de Baja California, comenzaron los problemas para sus familiares y es que les entregaron un cuerpo que no era el de Javier.
Según se ha podido determinar que aquel 7 de diciembre casi a la misma hora y en lugares cercanos, fallecieron Javier Quiroz y Abelardo Rivera Ramírez, el SEMEFO recogió ambos cuerpos en la misma camioneta, ahí se produjo la confusión a la hora de depositar los cadáveres en el anfiteatro, el personal colocó las identificaciones de manera equivocada.
Al ser notificados los familiares de Javier Quiroz, quienes viven en la tenencia de Ziráhuato de los Bernal, acudieron a Tijuana para recuperar el cuerpo de su ser querido, luego de realizar los trámites para su traslado fue traído a este municipio donde familiares y amigos lo velaron, le lloraron y finalmente lo enterraron en el Panteón de la tenencia.
Días después sus deudos recibieron la desagradable noticia por parte de la Fiscalía de Baja California, ellos habían cometido un «error» y se habían traído el cuerpo de otra persona por lo que debían realizarse unos estudios de ADN para despejar dudas y comprobar que efectivamente el cuerpo de Javier Quiroz permanecía en el SEMEFO de Tijuana y a quien habían enterrado en Ziráhuato se trataba de Abelardo Rivera Ramírez a quien sus familiares también estaban reclamando su cuerpo.
Una hermana de Javier, acompañada del licenciado Salvador Damián, se trasladaron hasta Tijuana para reconocer el cuerpo y realizar lo pertinente para su traslado exigiendo que la Fiscalía de Baja California se hiciera cargo de los gastos a manera de reparación del daño y corregir su error. Así, se acordó con el licenciado Rodrigo Arias, el pago de una cantidad de dinero y el envió del cuerpo de Javier, esto a finales del mes de Febrero. Desde entonces ni el licenciado Arias, ni el personal de la fiscalia de Baja California responden a las llamadas del abogado y de la familia misma.
Por su parte, los familiares de Abelardo Rivera Ramírez, ciudadano México-Americano a través del Consulado, solicitaron la exhumación del cadáver y traslado a Tijuana, la orden llegó el pasado Jueves a la fiscalía regional de Zitácuaro, quienes programaron la actuación para este lunes 30 de marzo a las 10 de la mañana, sin embargo familiares y habitantes de la tenencia llegaron al Panteón para evitar que la acción se realizará exigiendo a cambio que primero se comprometa la Fiscalía del Estado de Baja California a enviar el cuerpo de Javier Quiroz y realizar el pago acordado.
Así lo externaron la madre de Javier y sus hermanas, quienes lo único que piden a las autoridades de la Fiscalía del Estado de Baja California es que les envíen el cuerpo, tal y como lo acordaron cuando estuvieron en Tijuana, exigiendo rapidez ya que para ninguna de las 2 familias involucradas es justo lo que están viviendo.
Este lunes durante la concentración que realizaron en el panteón, con la presencia del Jefe de tenencia, familiares y amigos de Javier, lo señalaron directamente a él como responsable, en caso de que la Fiscalía Regional de Zitácuaro acuda al Panteón y exhume el cuerpo de la persona que fue sepultada ahí, creyendo sus familiares que se trataba de Javier Quiroz.
Aseguraron que con el intercambio de cuerpos se terminaría este calvario que han vivido desde aquel 7 de diciembre del año 2019 cuando les avisaron que su hijo y hermano había fallecido en la ciudad de Tijuana.