Garantizar derechos de internos, e impulsarlos para reincorporación social, exhorta Octavio Ocampo
- Visita Centro de Reinserción Social en Zitácuaro
En compañía del director general, subdirectora y encargada del área educativa del Cereso, Ramón Maya Alonso, Martha Paulina Herrera y Brenda Cruz Rojas, respectivamente, así como del Jefe Regional del Gobierno Estatal de Zitácuaro, Carlos Paredes, el presidente de la Comisión de Régimen Interno y Prácticas Parlamentarias en la LXXIV Legislatura en el Congreso del Estado, consideró muy positivo que en los centros de reinserción se realicen este tipo de actividades que son parte de nuestras tradiciones.
Tras reconocer la gran participación de los internos en este concurso, el diputado local compartió con los mismos y autoridades del centro, con quienes interactuó sobre cuáles son las necesidades que ahí se tienen.
El legislador consideró necesario que en todas los Ceresos se garanticen los derechos de los internos y se les impulse sobre el valor de la libertad, para que cuando salgan puedan reincorporarse de manera plena a la sociedad.
Llamó a fomentar en la población penitenciaria una cultura de participación, en la que también se realicen actividades culturales y recreativas, que les ayuden a reflexionar sobre la importancia de respetar la ley, como la libertad.
Asimismo, reconoció el trabajo que en Michoacán se realiza para garantizar que los internos de los Centros Penitenciarios y de Reinserción Social, al obtener su libertad, tengan una oportunidad de reintegrase a la sociedad.
Por lo que, se pronunció por el impulso de acciones encaminadas a la efectiva reinserción social de los presos; por ello, señaló que revisará a fondo la norma vigente para estudiar qué acciones en materia legislativa puede impulsar en el Pleno del Congreso.
En el Cereso de Zitácuaro, en el que hay 293 presos, de los que 15 son mujeres, el legislador revisó algunos de los planteamientos que se le hicieron, así – también – habló con los internos, en donde reconoció en ellos el deseo de salir adelante, al pagar su pena.
“Muchos de ellos están conscientes de por qué están ahí; se les ven las ganas de salir adelante, pero hay casos que duelen, en donde los internos tienen 10 ó 15 años sin que nadie los visiten, y para lograr la readaptación, es necesario ser solidarios y recordar que todo ser humano tiene derecho a una oportunidad”, señaló.