Contemplando la Creación. ¿PORQUÉ TIEMBLA LA TIERRA?
Ángel Espino García
1.- Había un ladrón muy astuto de nombre Lucas. Nadie podía descubrir sus robos. Era cruel y con un corazón de piedra. Un día entró al templo a robar la corona de Cristo. Lucas entró de noche, subió ante la Imagen y al tomar la corona, Cristo lo abrazó y lo apretó contra su corazón. ¿Qué es esto?, gritó el ladrón. Por más que se esforzó, no pudo librarse. Se llenó de nervios, porque al amanecer vendrían los fieles y lo llevarían a la cárcel. El bandido temblaba de miedo al ver los ojos de Cristo, el cual lo miraba con amor. Ante la mirada divina, Lucas comenzó a sentir un cambio, pues Jesús lo bendecía. Lucas salió del templo hacia la calle con gran arrepentimiento. Eran la fe y el amor que ardían en su corazón. Lucas ya era otro.
2.- ASÍ EN LA ECOLOGÍA.- El ser humano ha rebasado los límites de la naturaleza, abusando de los bosques y contaminando el aire, el agua y el suelo. Mientras no practiquemos “La ética de la supervivencia”, cuidando el derecho a la vida, nos estamos dirigiendo a un posible “Humanicidio”, donde será el llanto y la desesperación. Los héroes dan su vida por la patria, pero pocos cuidan y defienden la vida de la madre Tierra. No destruyamos el planeta.
3.- LA VOZ DE LA IGLESIA.- “El crecimiento económico tiende a producir automatismos en orden a simplificar procedimientos y a reducir costos. Por eso es necesaria una ecología económica capaz de obligar a considerar la realidad de manera más amplia. Porque la protección del medio ambiente deberá constituir parte integrante del proceso de desarrollo y no podrá considerarse de manera aislada”. (L. S. #151)
4.- PORQUÉ TIEMBLA LA TIERRA.- Cuando una cueva de rocas se rompe, puede temblar todo el planeta. Los terremotos violentos son pavorosos: derrumbes de edificios y ruidos tremendos. Nuestro planeta cada año tiembla como un millón de veces, pero de ellos solo media docena son violentos y dos más, son catastróficos. La mayoría se concentra en dos zonas angostas: una flanquea el Océano Pacífico y la otra zona atraviesa el Caribe, el Mediterráneo, los Alpes y el Himalaya. Los sismólogos que estudian los terremotos, miden la intensidad de esos movimientos, y los enumeran del 1 al 12. Los del 1 al 5 causan poco daño, aunque la gente se espanta; El 6 y 7 son serios. Pero del 8 al 12, causan destrucción, mucho miedo y sonidos aterradores. ¿Qué podemos hacer? Construir bien las casas y cuidar el planeta. Dice la Santa Biblia: “Lo que uno siembra, eso cosechará” ¡Salvemos lo verde!