Ángel Espino García. Contemplando la Creación: SE FUE EL PADRE PACO Y LLEGÓ EL P. JAIME
Ángel Espino García
1.- Había un maestro que caminaba por la montaña con sus discípulos. La sabiduría del maestro tomaba cualquier tema para hacer una reflexión. Cuando se ocultaba el sol, preguntó: muchachos: ¿Ustedes saben a qué hora es de día o cuándo amanece? Un alumno dijo que cuando se distingue una asno de un toro; otro dijo que cuando se distingue un lechero de un policía. Otro dijo que cuando se distingue un farol de una estrella. Cuando se agotaron las respuestas, dijo el maestro: muchachos: cuando miran a una persona y reconocen en ella a un hermano, entonces es de día, y si no es así, entonces sigue siendo de noche.
2.- ASÍ EN LA VIDA.- La madre de cada uno es lo más hermoso y lo más grande. Dios quiso darle el poder de traer la vida al mundo y cuidar de ella. La mamá es la que enseña a sus hijos a ser padres y madres. Decía una educadora: “La mano que mece la cuna, es la que mueve el mundo”. “Eduquen a un hombre y habrán hecho un ser útil para la sociedad. Eduquen a una mujer y habrán educado a una familia. El famoso científico y sacerdote Teilhard de Chardin, al hablar de su madre decía: “Debo a mi madre lo mejor de mi alma. Ella fue la chispa que hizo surgir el fuego en mi vida”. Tanto el Padre Jorge Francisco como el Padre Jaime Alvarado han tenido una madre maravillosa. De allí, su vida fructífera. ¡Felicidades!
3.- LA PASCUA DEL PADRE JORGE FRANCISCO.- Se nos fue un líder carismático, fraternal y generoso. Nos dolió a todos, incluyendo a los señores Obispos. Su Eminencia el Cardenal Alberto expresó: “Me dolió. Era mi amigo”. Lo que nos consuela, como decía el Padre Froylán Chávez: “Lo bueno es que hay cielo”. Uno de los aspectos más bellos de nuestra fe es: “La comunión de los Santos”. En el momento en que se presenta el alma ante Cristo para su juicio particular, una multitud de abogados se presenta y se interpone con su caritativa intercesión. Esa caridad en el corazón de los creyentes es como una alegría del paraíso que Dios mismo suscita en el corazón de la Iglesia que ruega por vivos y difuntos, pues la meta es la gloria eterna en el Reino de los cielos.
4.- LA BIENVENIDA AL P. JAIME EN EL SANTUARIO DE LOS REMEDIOS.- Era las 13.00 hrs. En orden de dos en dos, los fieles se acomodaron con la sana distancia en cada banca. Varios fotógrafos transmitían la ceremonia por las redes sociales. Treinta sacerdotes se hicieron presentes para ser testigos de la historia: orar por el Padre Jorge Francisco y acompañar al nuevo Párroco Jaime Alvarado. Así lo describió el P. Vicario Episcopal en su homilía: “El P. Jaime es un hombre amistoso, trabajador y generoso”. ¡Enhorabuena! ¡Salvemos lo verde!